El seguimiento de cada jugador en el encuentro ante Cruzeiro ¿La figura? Ramon Abila ¿El más flojo? vacante.
Marcos Díaz: Durante el primer tiempo bloqueó dos pelotas complicadas, un remate frontal donde terminó dando rebote y una volada sobre su palo derecho en clara acción de riesgo. Siempre mantuvo seguridad y respondió bien en las oportunidades donde Cruzeiro lo probó. Se la jugó por un lado en el penal, pero quedó lejos de bloquear. Tras algunos altibajos, fue solido en un partido bien picante.
Federico Mancinelli: Otro gol de los importantes para Mancinelli, que siguió la jugada y definió de forma perfecta con un cabezazo que decretó el tres a uno final. Antes había participado en la previa al primer gol, acompañando la acción ofensiva y sacando un centro dentro del área. El pelado marcó con fiereza y firmeza, fue prudente en sus proyecciones y terminó completando una actuación para el aplauso.
Martín Nervo: Buen partido de Nervo, que levantó su nivel en relación a los encuentros anteriores. Peleó mano a mano con el complicado Damiao y terminó saliendo con aire. Ganó mucho en la pelota aérea, tuvo tranquilidad y criterio para salir desde el fondo e incluso se encontró con una inmejorable oportunidad para convertir, pero elevó su cabezazo.
Eduardo Domínguez: Bancó la parada con mucha seguridad, ante los movedizos y siempre peligrosos jugadores de Cruzeiro. Eduardo mantuvo la calma durante el grueso del partido y fue la primera salida del Globo en muchas oportunidades. Quedó una mancha en su actuación con el penal, donde llegó con lo justo ante la posición de un Damiao presto para convertir. No tenía mucho más por hacer, por suerte sus aciertos pesaron mucho más en el desarrollo final del juego.
Luciano Balbi: Una de las principales razones del rotundo cambio en el funcionamiento del equipo se llama Luciano Balbi. El marcador de punta aporta quite y fluidez sobre la banda, pero también le otorga soporte a Domínguez, libertad a Gamarra y opción limpia de pase a Vismara. Con él la defensa casi no tuvo momentos de desorden notorio (como el que nos costó varios de los últimos goles que nos hicieron). Volvió y jugó todo el partido en buen ritmo y nivel, marcó con mucha seguridad y ratificó su importancia en el equipo.
Lucas Villarruel: Lucas fue muy importante para el equipo, aún sin estar con todas las luces encendidas. Una fiera con la marca, corrió para cubrir mucho espacio y participó en casi todas las circulaciones productivas del equipo. Cometió algunos errores producto de la imprecisión, que implicaron recuperaciones rivales en nuestra salida. En líneas generales fue importante, en silencio pero cerca de las jugadas, habilitó a Wanchope en el primer gol. Siempre esperamos más de Lucas, porque lo puede dar.
Federico Vismara: Partidazo de Vismara, de sus mejores producciones en Huracán, sino la mejor. A las habituales recuperaciones le agrego el juego frontal y veloz, rápido en las ejecuciones y atinado en los criterios. Ganó mucho en el mediocampo y siempre se animó a desdoblarse para dar inicio a las ofensivas. Se comió crudo a Damiao en la previa al primer gol, y metió algunos balones dentro del área que pudieron terminar en conquista. Fue el mejor jugador del Globo en el partido, a lo largo de los noventa minutos, pese a que hubo uno más determinante.
Alejandro Romero Gamarra: Otro que levantó, y se sintió. Kaku jugó con el soporte de Balbi y pese a que arrancó bastante encasillado en su sector con el correr de los minutos fue soltándose hasta crear complicaciones al rival. Metió la pelota en el tercer gol, pero también dejó dos veces a Ábila en posición de conquista. Alejandro corrió y metió por igual, encontró espacios para jugar y volvió a conseguir ventajas con su velocidad.
Patricio Toranzo: En un principio se lo notó tocado desde lo físico, pero durante el partido Patricio entró en calor para lograr mucha participación con la pelota. Toranzo jugó y siempre intentó ser prolijo en sus ejecuciones, al margen de unas pocas pérdidas. Habilitó a Puch en la previa al segundo gol, buscó el arco sin demasiado éxito y también generó ataques gracias a su buena pegada y visión de juego. A seguir así Pato, lúcido con y sin la pelota.
Edson Puch: Gran actuación del chileno, que terminó metiéndose a la gente en el bolsillo. Siempre obligó por la banda derecha y fue una auténtica complicación para la defensa de Cruzeiro. Corrió mucho y siempre en sentido al arco rival. Armó un jugadón para habilitar a Ábila en el segundo gol, y cortinó a su lungo marcador en el tercero. Con vértigo y toques de calidad se mostró como una fuerza importante de ataque, sin generar demasiado para él mismo, potenció de forma considerable a Wanchope.
Ramón Ábila: Hizo lo que parecía imposible, dos goles en diez minutos al Bicampeón del fútbol brasilero. Wanchope definió con calma y justeza en el primer gol, mientras que no dudó un solo segundo en fusilar a Fabio en el segundo. Tuvo una volea para el tercero en el primer tiempo, también un ingreso al área a puro lujo que sacó el portero rival. En el complemento tiró una chilena, erró un cabezazo increíble y volvió a dejar en ridículo al uno visitante para que su disparo recorra toda la línea de gol. Ábila jugó un partido genial dentro del área, y otro muy bueno fuera de ella; Comenzó a darle forma al triunfo a pura eficacia y se bancó todo el partido en gran ritmo de juego, además de ganar mucho ante sus duros marcadores. Felicitaciones para Ramón, que de mantener cierta regularidad seguirá subiendo su vara personal.
Agustín Torassa: Entró para aportar frescura en el ataque, y movilidad en la transición defensa-ataque. Agustín se metió rápido en el partido y completo un ingresó muy correcto.
Alejandro Gallegos: Reforzó el mediocampo y gracias a su fiereza en la marca logró atorar bien los avances que intentó Cruzeiro con el resultado ya establecido. Se movió bastante y estuvo pendiente exclusivamente de la marca.
Iván Moreno y Fabianesi: Pocos minutos para el Torero, sin errores ni grandes aciertos.
Quemero de nacimiento, Socio A01775. Locutor Nacional, redactor y Vermoutheano. 10 años en Soy Quemero.