Dura derrota del Globo en Venezuela. Fue goleado 3 a 0 por Mineros y quedó eliminado de la Copa Libertadores. Sin respuestas desde lo anímico y con una notable falta de actitud, Huracán hizo poco para vencer a un rival eliminado, y el sueño copero quedó en nada. Caída que duele por las formas, pero con pronta revancha el próximo sábado, por la Supercopa Argentina frente a River.
LO BUENO
Revancha en pocos días: Lo único rescatable es que este plantel puede cambiar rápidamente la triste imagen mostrada anoche. El sábado, ante River en San Juan, por la Supercopa Argentina, Huracán podrá sumar su título N° 13. Ante un rival de mayor jerarquía, deberá jugar con otra actitud y hacer todo lo posible por obtener la victoria, para que todo el esfuerzo de los últimos meses no haya sido en vano. Y si se quiere buscar otro aspecto positivo, el Globo podrá enfocarse de lleno en el torneo local. Pedido por muchos hinchas, y con la urgencia que muestra el lugar ocupado en la tabla, Huracán pondrá en cancha lo mejor que tiene, en busca de recuperar todos los puntos perdidos. Una cadena de victorias dejará este mal trago de lado, hará que la gente recupere la confianza en el equipo y alejará cualquier tipo de fantasma. Habrá que trabajar mucho y con humildad. Se retrocedieron varios casilleros, pero no hay que volver al punto de arranque, que fue la fatídica tarde contra Sportivo Belgrano.
LO MALO
El primer tiempo: La imagen más pobre mostrada en muchos meses. A Huracán sólo le servía ganar para pasar de ronda, y no actuó en consecuencia. Por lo menos, esa fue la impresión que dejó el andar de los jugadores. Una alarmante falta de actitud en cada uno de los jugadores que salieron a la cancha. No se jugó como una final. Huracán le imprimió un ritmo cansino al partido, con una circulación del balón al trotecito que no se modificó siquiera con el tempranero gol del local. Una defensa que no pudo contener ningún avance local, un mediocampo que no recuperó, y un ataque sin vértigo y muy anunciado. Los primeros 45 minutos dejaron al Globo 2 a 0 abajo en el marcador, y con rendimientos individuales preocupantes.
La forma de perder: “La que le pide huevo a los jugadores, para ganar la Copa Libertadores” fue el nuevo cantito de la hinchada al momento de arrancar la participación en esta competencia. Y anoche esto faltó. La manera en que perdió Huracán es lo que más molesta. Es obvio que el objetivo no era ganar la Copa, pero sí hacer un torneo lo más digno posible. Y pasar de fase en un grupo integrado por un equipo boliviano y otro venezolano era una posibilidad muy grande. Este equipo había sacado chapa en paradas importantes; por lo cual, ante un rival a priori inferior y ya eliminado de la Copa, se esperaba otra cosa. No hubo respuesta futbolística ni anímica para remontar un partido que encontró sorprendentemente al Globo en desventaja desde los 10 minutos. Termina tirando por la borda lo que era una aceptable Copa Libertadores hasta ayer, en la que Huracán no había conocido la derrota tras siete partidos disputados. Incluso le había ganado a Cruzeiro tan sólo una semana atrás con gran autoridad. Por ello sorprende e irrita la actuación de ayer. Un equipo que se entregó y no peleó por el objetivo principal de esta primera parte del año, que era estar entre los mejores 16 equipos de América. Una derrota, si se quiere llamar digna, podría haber sido caer en un partido de golpe por golpe. Pero el Globo sólo logró volcarse decididamente al ataque en el segundo tiempo, sin demasiada profundidad a pesar de la abundancia de delanteros. Una triste despedida ante un rival que no jugaba por nada, pero que hizo mucho más que Huracán por quedarse con los tres puntos.
Patricio Toranzo: Del Toranzo de Lima definitivamente no quedó nada. Caminó la cancha hasta que fue reemplazado a los 15 minutos del complemento, de una manera exasperante. Erró pases a dos metros de sus compañeros y ni siquiera fue certero con la pelota parada. Todo un signo de lo que fue Huracán.
Ramón Ábila: Prácticamente no tuvo una situación de gol clara en todo el partido. Como todos los partidos, quedó en off side en muchas jugadas, pero no supo generar esa chance que siempre tiene para convertir. Terminó chocando mucho con el arquero local, y su peligrosidad se fue diluyendo con el correr de los minutos. Con el Globo jugando muy mal, “Wanchope” no pudo escapar de la realidad del equipo y su aporte fue nulo.
LO FEO
Presente complicado: La Copa Libertadores era como una especie de velo que ocultaba la realidad inmediata del Globo, en afán de llegar a los octavos de final como objetivo primordial. Eliminados de la copa, la realidad vuelve a ser dura. Huracán se jugó (con justa razón) un pleno total por avanzar en la Copa Libertadores, en desmedro del torneo local, que con 30 fechas por disputarse daba chances de recuperarse. Sin embargo, abril, el mes más importante en mucho tiempo para el Globo, va camino a convertirse un fracaso estrepitoso. Se perdieron los clásicos ante Boca y Racing, y son cuatro las derrotas consecutivas en el torneo local. Con 7 puntos, Huracán ocupa los últimos puestos del campeonato, y obviamente tiene un promedio paupérrimo. Y lo que era un torneo largo, de cara a noviembre se convierte en un torneo corto, ya que quedan 20 fechas por disputarse, en los que el Globo deberá sumar demasiados puntos para no sufrir otra vez con el descenso. Eliminado de la Copa en la fase de grupos por un equipo sin jerarquía que no se jugaba por nada, pone sobre la mesa la oportunidad histórica desaprovechada. La dirigencia se conformó con la Copa Argentina y con el ascenso, y en vez de buscar dar el salto de calidad en pos de recuperar la grandeza del club, decidió hacer la plancha. Con el presidente de vacaciones durante el mercado de pases, el vicepresidente pidiendo por twitter “relajarse y gozar”, y con Gustavo Mendelovich afuera de la CD, se hizo absolutamente todo mal. En lugar de incorporar jugadores de calidad como para potenciar al equipo titular y armar un equipo alternativo competitivo, se trajeron jugadores de relleno. Carrera, Blazquez, Bruna, Distéfano, Gil Clarotti, son algunos de los nombres. Sólo Nervo (quien debió reemplazar a Erramuspe) y Balbi lograron acoplarse al equipo titular con rendimientos satisfactorios. Edson Puch, con una gran inactividad, pudo acomodarse en los últimos partidos. Y el “Rolfi” Montenegro, que vino sobre el cierre del libro de pases, todavía está en deuda. Los resultados en los partidos en los que el Globo preservó jugadores, hablan por sí solos. De cinco partidos, un empate y cuatro derrotas. Hoy se está pagando la mala gestión dirigencial y la pasividad del cuerpo técnico durante la pretemporada. Huracán no tiene un plantel para afrontar dos competencias, y quedamos sin el pan y sin la torta. Una victoria ante River el sábado será al menos un consuelo, por el mero hecho de sumar una estrella más y clasificar a la Copa Sudamericana. Pero es una lástima haber desaprovechado semejante oportunidad. Ojalá haya una autocrítica de todos los responsables.
LOS NÚMEROS
Historial ante Mineros: Segundo partido disputado. Una derrota y un empate.
Última caída por torneos internacionales: Había sido por la Copa Conmebol en 1994. Derrota 4 a 1 ante Cerró Corá de Paraguay.
Última victoria de visitante por torneos internacionales: Goleada 4 a 0 ante Alianza Lima, por el repechaje de la actual Copa Libertadores. Goles de Ábila, Romero Gamarra y dos de Toranzo.
LAS PERLITAS
La figura Quemera: Vacante.
La desilusión Quemera: Los once jugadores que salieron a jugar.
La mejor jugada: Vacante.
La peor jugada: Tras una segunda jugada en un córner, Villarruel no puede con Agustín Peña, que logra desbordarlo y tirar un centro perfecto que supera a Marcos Díaz y encuentra a Valoyes para empujar de cabeza el balón, convertir el primer gol, y comenzar a sentenciar la noche.