Gonzalo Marinelli: Pudo haber hecho algo más en los primeros dos goles de Cristal. En el primero la pelota pasa por encima de su humanidad y en el segundo se vuelca demasiado sobre su palo izquierdo, dejando un hueco notorio en el derecho. Luego del penal su actuación levantó y salvó un par de veces a Huracán en pleno proceso de remontada. Para destacar su velocidad de piernas y saque de arco, pero en líneas generales su actuación no fue buena.
Carlos Araujo: Tuvo una actuación correcta, cortando muchos avances de Cristal y acoplándose con mucho criterio al ataque. Los últimos quince minutos arrancó en el mediocampo y le comieron mucho la espalda, pero siempre producto de la incesante búsqueda del empate. El Pipi tiene conceptos de juego muy claros y los vuelca a favor del equipo.
Mario Risso: Hizo un muy buen segundo tiempo, donde quitó muchos balones y fue criterioso para jugar al pelota con el equipo volcado en ataque. Durante la primera mitad alternó buenas y malas pero no cometió grandes errores. Quedó en la foto de los dos primeros  goles, llegando tarde al cruce con la jugada prácticamente definida.
Federico Mancinelli: De menor a mayor, comenzó con algunas imprecisiones pero logró afirmarse con el correr de los minutos. Tomó la lanza cunado el equipo se fue con todo a buscar el empate y hasta se quedó varios pasajes como delantero. En lo estrictamente defensivo tuvo una actuación irregular. Quedo muy mal parado en la segunda conquista de Cristal, donde corrió siempre de atrás a Silva.
Luca Sosa: Le pasaron todas, en su incursión como marcador de punta izquierdo. Arrancó bien, presionando alto y con buen criterio para mover la pelota. Lo amonestaron temprano y sufrió el desborde de Calcaterra en el primer gol, donde quedó mal parado. En el segundo gol reaccionó tarde y junto a Mancinelli “tomó la patente” del delantero que terminaría convirtiendo. La frutilla del postre amargo fue la infracción del penal, leve pero suficiente para que el árbitro cobrara y le mostrar la segunda amarilla. Su balance personal en el año da positivo, así que esperamos que se recupere en la próxima oportunidad de jugar que tenga.
Matías Fritzler: Estuvo mejor en la recuperación que en la circulación de la pelota, robó unos cuantos balones y pese a un par de malas entregas no desentonó dentro del círculo central. Terminó golpeado por una fuertísima infracción, que lo sacó de la cancha en el entretiempo.
Lucas Villarruel: Otro que estuvo condicionado por la amarilla tempranera, en su regreso como titular luego del accidente en Venezuela. Lucas intentó jugar en el mediocampo pero se lo notó falto de ritmo, pisó el área en un par de oportunidades rematando a puerta y también colaborando en la recuperación previo a la jugada que Espinoza reventó el travesaño. Fue reemplazado bien en el medio tiempo, pero es positivo que sume minutos nuevamente.
Mariano González: Mal partido de Mariano, el más flojo con nuestra camiseta. Había descansado el fin de semana pero se lo notó lento y predecible, erró muchísimos pases y regaló ataques rivales por no tomar buenas decisiones. Es cierto que se movió mucho y que ayudó en la recuperación, pero falló cada vez que se sumó al ataque y desperdició una oportunidad genial con el partido 3 a 2. Ojalá haya sido solo una mala noche y González vuelva a aportar cosas buenas al equipo pronto.
Daniel Montenegro: Sintió el gran desgaste físico que realizó en los últimos partidos. Montenegro estuvo muy participativo pero se quedó sin piernas en los minutos finales, donde aun así no dejó de moverse. Estuvo más cerca de los volantes que de los delanteros y si bien dio buenas pases no pesó demasiado en ofensiva. Generó con una volea el rebote que terminaría transformando Ábila en el primer gol. Con el diario del lunes quedó la sensación que Rolfi debería haber arrancado desde el banco este partido, jugó los noventa minutos y lo necesitamos bien en Varela.
Cristian Espinoza: Buen partido de Cristian, que levantó su nivel y su participación positiva. En el primer tiempo arrancó con dudas pero se fue afirmando, armó algunas situaciones de gol y también pegó un derechazo en el travesaño. Ya en el complemento mantuvo al mínimo el margen de error, habilitó a Ábila en el segundo gol y se mostró siempre como opción de pase. Lejos de su techo, Espinoza pesó favorablemente para Huracán.
Ezequiel Miralles: Un partido liviano de Ezequiel, que fue muy castigado el juego brusco por el rival. Le pegaron un patadón de expulsión en el primer tiempo y se golpeó muy feo la cara en el complemento, por lo que debió dejar antes el partido. Pisó el área pero no logró tener una presencia contundente en la portería de Penny.
Ramón Ábila: Sus goles fueron esperanza para el Globo, Wanchope saltó desde el banco en el complemento y devolvió la paridad al resultado. Anotó dos goles mano a mano (El segundo, otra joya), Penny le sacó uno muy bien y erró un zurdazo dentro del área chica. En el balance sin dudas termina siendo clave lo que aportó Ramón, que revolucionó el ataque Quemero en apenas 45 minutos. Y nos dejó con ilusión hasta el final.
Mauro Bogado: Entró para aportar equilibrio en el mediocampo tras el fuerte golpe de Fritzler. Mauro descansó un tiempo y le tomó algunos minutos meterse en el partido, pero lo logró con buena presencia en zona media y correctas intervenciones en la distribución de la pelota.
Alejandro Romero Gamarra: Entró por Miralles y aportó frescura en el ataque, además de dar soporte a la banda izquierda del equipo. El Kaku mostró soltura, trató bien a la pelota y tuvo momentos de lucidez como ese pase entre líneas para Ábila que salvó Penny.