Superliga 2017/18 – Fecha 3; Gimnasia LP 1 vs. Huracán 3 – En un escenario que le era esquivo hace 31 años, el globo de Alfaro se trajo 3 puntos de oro de La Plata, planteando un partido bien al estilo del ex técnico de Arsenal.

Con el clásico 4-4-2 que propone Gustavo Alfaro, Huracán salió a la cancha para confirmar la imagen positiva que había quedado el lunes pasado cuando enfrentó a Newell´s en el Ducó. Respecto a ese partido hubo dos variantes: la inclusión de Nazareno Solís en lugar de Alejandro Romero Gamarra (decisión del técnico por el fallecimiento de la madre del “Kaku”), y la vuelta a la titularidad de Patricio Toranzo por el lesionado Mauro Bogado.

Desde un primer momento el conjunto de Parque Patricios le cedió la pelota a su rival para que este la maneje y tome las riendas del partido, apostando al juego de contra. Durante toda la primera etapa el globo se mostró muy bien parado y ordenado, diluyendo así las intenciones de Gimnasia para atacarlo. Se optó por utilizar a los carrileros Ignacio Pussetto y Nazareno Solís como sus mayores artífices en ofensiva. Se notó que el ex Boca siente mucho más esa posición que Romero Gamarra, y fue de suma importancia para marcar su banda junto a Lucas Villalba. Ni hablar del ex Rafaela que uno ve que cada partido se siente más cómodo en esta nueva tarea que le propone Gustavo Alfaro.

Los otros dos integrantes de la zona media fueron “Pato” Toranzo y Adrian Calello. El ex Quilmes fue quien tuvo más responsabilidades a la hora de defender y Patricio el que se liberó más en ataque cuando Huracán tuvo en su haber la pelota. Sin ir más lejos, fue el 18 quemero quien con una exquisita asistencia le cedió la pelota a Pussetto en el primer gol del globo a los 30 minutos del primer tiempo, que finalmente terminaría mandando a la red Wanchope Abila.

En la zona ofensiva Huracán contó una vez más con Ramón Abila y Fernando Coniglio como sus referentes de ataque. El ex Olimpo aparece como una figura muy cómoda para “Wancho” como segundo delantero: se hace cargo de bajar todo lo que le tiran y del “juego sucio” o del que no se ve, pero que es de suma importancia en todo equipo. Coniglio sabe que mientras Abila esté en el plantel su función va a ser esa, y habla muy bien de él que la acepte y la asuma tan positivamente. 

En el complemento y con el resultado adverso, Gimnasia salió literalmente a comerse a Huracán. El globo siguió con el mismo librito que en el primer tiempo, pero esta vez con “Nacho” Pussetto como el gran encargado del poderío ofensivo. A los 5 minutos Coniglio tuvo que abandonar la cancha por lesión y en su lugar ingresó Diego Mendoza para sustituirlo. La posición del ex Estudiantes y Nueva Chicago fue de delantero cuando el globo atacaba, pero cuando la pelota estaba en los pies de los jugadores de Gimnasia, Mendoza hacía las veces de volante y ayudaba a la línea de 4 del medio a marcar a los jugadores rivales, quedando Abila como única referencia arriba.

Cuando Huracán consigue el 2-0 en los pies de Ignacio Pussetto, tras una gran asistencia de Wanchope, daba la impresión de que el partido estaba “cocinado” para los de Alfaro y que era cuestión de que pasen los minutos y se consuma el encuentro. Pero como bien nos tiene acostumbrados nuestro querido globo, con el gol de Nicolas Colazo a los 63 del segundo tiempo, Alfaro se vio obligado a mover piezas en el esquema: decidió la inclusión de Lucio Compagnucci en lugar de Patricio Toranzo para reforzar la marca en el medio, teniendo en cuenta la vocación defensiva que caracteriza al ex Velez.

Con el correr de los minutos, la tensión y el desgaste físico no se hicieron esperar, por eso nuevamente a los 77 minutos del complemento, el técnico quemero tuvo que meter mano en el equipo con el ingreso de Romero Gamarra en lugar de un agotado Solís. Se vio nuevamente un gran partido del paraguayo Saúl Salcedo en el fondo, despejando algunas contras triperas. No así de un dubitativo Martín Nervo, que venía levantando en los pasados cotejos ante Newell´s y Colón. Párrafo aparte para el gran partido en el arco de Marcos Diaz, fundamental para aguantar las arremetidas del rival con 3 tapadas fundamentales que tenían claro destino de gol. Para el final quedó la frutillita del postre, con ese delicioso zurdazo de afuera del área de Nacho Pussetto para confirmar la victoria quemera. 

Se ganó, y esa es una realidad. La cuestión está si con estos planteos en los que se prescinde de la tenencia de la pelota, el globo va a poder enfrentar a rivales de mayor envergadura que Gimnasia. Para los que vimos alguna vez jugar a los equipos de Alfaro esto no nos sorprende: cuando se lo contrató sabíamos que el equipo iba a jugar a esto y más de visitante. Por el momento los resultados acompañan y el panorama muestra muchos más puntos positivos que negativos, ojalá se pueda mantener con el correr de los partidos.