Superliga 2019/20; Fecha 3 – Patronato 2 vs. Huracán 1 – Huracán no despertó en la mañana paranaense, cayó ante Patronato en un estadio siempre adverso y frenó en seco su buen inicio de Superliga. Al Globo le costó todo recibir un gol en dos minutos, cada vez que intentó reaccionar terminó desnudando falencias en cada línea. El local anotó el segundo cuando poco se lo esperaba y el golazo de Briasco puso suspenso en un cierre donde el equipo lo buscó con empuje pero sin precisión. A pasar de página rápido.

Mañana de sol en el Bartolomé Grella, Huracán y su ilusión se presentaban tras el párate electoral buscando puntos frente a Patronato, uno de los tres peores promedios en el inicio de la Superliga. Vojvoda presentaba una sola modificación en relación al equipo de derrotó a Colón, Javier Mendoza reemplazaba a Norberto Briasco tirando a Garro a la derecha del ataque.

Pero la burbuja se pinchó en apenas dos minutos y tras un tiro de esquina insólito, el viento frenó un balón que Faravelli no pudo contener en la salida y el remate de Chimino decantó en córner. Abero lo levantó desde la izquierda, la redonda superó el salto de Chávez y Gabriel Ávalos se morfó a Bareiro para cabecear a gol ante el estático Silva.

Ganaba Patronato y Huracán debía barajar de nuevo, el equipo quedó rápidamente largo y con sus líneas inconexas. Gómez era el encargado de distribuir juego en las inmediaciones del círculo central pero al Droopy le faltó precisión para dar curso a sus buenas intenciones. Chávez quedaba lejos de todo y tanto Mendoza como Garro debían apelar a alguna maniobra individual para intentar sortear la pegajosa marca; el denominador común fueron la alta cantidad de infracciones que realizó el rival, cortando varios avances con balón dominado y beneficiados por la liviandad de Delfino a la hora de sacar tarjetas.

Huracán tenía la pelota pero era inofensivo, incluso Calello terminó destacando por ser la pieza que evitaba el desmoronamiento defensivo. Pero pasada la media hora un pase atrás de Walter Pérez, en terreno rival, terminó habilitando la corrida de Silveira a espaldas de los centrales; el uruguayo eludió a Silva mano a mano pero terminó definiendo pésimo por sobre el travesaño cuando la zaga intentaba cubrir el arco desprotegido.

Pero a pesar de todo lo mencionado Huracán debió irse al descanso 1-1, sin embargo Juan Fernando Garro erró una posibilidad increíble de frente al arco; Rodrigo Gómez atinó al fin un tiro libre frontal pero el mendocino enganchó la redonda por sobre el travesaño, a centímetros de la línea de gol. Demasiada ventaja para el rival.

Ya en el complemento el Globo amagó nuevamente a acomodarse, sin cambios, con Walter Pérez sacando desde afuera del área el zurdazo que Matías Ibáñez desactivó perfecto. Pero en trece minutos llegó un nuevo mazazo, el contragolpe del Patrón encontró mucho aire a espaldas del fondo Quemero, la redonda fue de izquierda a derecha, donde Chicco lanzó el centro al área. Los centrales fueron con el mismo atacante, Salcedo liberó a Hugo Silveira y este solo debió direccionar su cabezazo a gol. 2-0.

Entonces comenzaron los cambios, Juan Vieyra debutó en lugar de Faravelli y Norberto Briasco reemplazó a Garro. Pero las situaciones eran de Patronato, que hacían figura a un Silva determinante para evitar diferencias mayores.

Y a quince del cierre el momento que encendería la ilusión, Vieyra levantó desde la izquierda la redonda que Norberto Briasco dominó de pecho detrás del punto penal; el Beto se acomodó con un sombrerito ante Abero y castigó con certero derechazo a gol. Golazo par el 1-2.

Coniglio por Mendoza y con todo a buscar la igualdad, Huracán tuvo la pelota ante un rival que bajó la cortina metálica pero le faltó lo que no tuvo en toda la mañana: precisión. Gómez erró muchos pases, también Calello en posición de lanzador y no supimos cómo llevar rápidamente la pelota al área rival.

Lo más cerca de empatar fue una tijera incómoda, de zurda, que Salcedo tiró a manos de Ibáñez. El golero también hizo simple un tiro libre potente de Chávez. No hubo tiempo para más, derrota 2-1.

El equipo no dejó buenas sensaciones, tuvo el empuje para intentar sobreponerse a las falencias pero jamás le encontró la vuelta. Aun así pudo llevarse algo con algún intento aislado en diferentes momentos de la mañana, de todas formas está claro que la actuación fue un paso para atrás en relación a lo que se venía gestando.

Que pase rápido, a seguir trabajando para quedarnos con la victoria le venidero lunes contra Argentinos Juniors en el Ducó.