Superliga 2019/20; Fecha 8 – Huracán 0 vs. Atlético Tucumán 0 – El seguimiento de cada jugador del Globo.

Antony Silva: Mantuvo la portería en cero por segundo juego consecutivo, lo hizo con poca participación pero seguridad a la hora de responder. Su principal tarea fue descolgar centros y algún tiro al cuerpo, cumplió. En el cierre fue protagonista de una confusa jugada, fue a protestar sin tener en cuenta que la pelota estaba en juego y le cobraron mano afuera del área; de ese tiro libre tuvo su mejor atajada en la tarde, que fue también la última acción del duelo.

Gonzalo Bettini: Regresó a la titularidad tras la expulsión de Araujo y dejó mejores sensaciones que en partidos anteriores. Eso sí, más allá de la voluntad ofensiva le faltó precisión para culminar avances y perdió oportunidades nítidas por ejecutar mal centros en buena posición. Para la marca estuvo atento.

Saúl Salcedo: Correcto partido de Saúl, con algunos errores pero sólido en líneas generales. Fue salida en varias oportunidades y supo romper para sacar al equipo del fondo. De arriba ganó bastante y pudo apoyarse en la seguridad se su compañero de zaga.

Lucas Merolla: Otro buen partido de Lucas, mejor que el anterior, para recuperar confianza tras un inicio de Superliga malo. Merolla fue impasable con balones aéreos y mostró buenos recursos en el hombre a hombre ante delanteros de experiencia, además tuvo buen tiempo para salir a cortar adelante logrando dos o tres anticipos que desactivaron ofensivas del rival. A seguir por este camino.

Cesar Ibáñez: Lo mejor del Globo, por regularidad y empuje. Ibáñez volvió a mostrar oficio para moverse en el puesto, buscó siempre ser salida limpia, con errores y aciertos, pero casi siempre despejó la pelota con buen criterio. Estuvo fino en los retrocesos, incluso cerrando por banda derecha, y evitó contragolpes claros por marcar bien. Tiene talento para el mano a mano, ítem que casi siempre ganó, y deberá irse animando a pisar más el terreno rival. Por lo pronto cumplió, otra vez, demostrando por qué puede ser titular en un puesto vacante.

Mariano Bareiro: Otro que cumplió y levantó en relación al partido anterior. Nadie me sacará de la cabeza que Bareiro es un central adelantado, sin embargo en esta oportunidad tuvo contacto con la pelota y fue el primer pase en varios avances del equipo. En cuanto a la marca estuvo de los cerca de los rivales, aunque la rápida amarilla le sacó intensidad. Parece que allí lo veremos mientras Apuzzo sea el DT, y por ahora lo justifica.

Mauro Bogado: Su regreso a la titularidad mucho tiene que ver con la mejora defensiva del equipo, Mauro tiene el pulso del mediocampo y sabe pararse para mantener el círculo central siempre cubierto. A veces el físico le quita despliegue y también falló pases limpios, en contraposición metió un par de bochazos muy buenos que generaron situaciones claras para el Globo. Buen partido del capitán.

Rodrigo Gómez: Por momentos pasado de revoluciones, casi siempre fino para ejecutar bien sus intentos de pases largos. Con delanteros más lúcidos Huracán generaría mucho más con los lanzamientos que Gómez ya juega cada partido, por lo pronto y en carácter individual volvió a lastimar con dos tiros libres, el segundo se estrelló contra el poste. Los momentos de laguna no sacaron a Droopy de partido, se lo notó con confianza y eso es fundamental.

Norberto Briasco: Flojo partido de Beto, sin un rol definido y con mucho despliegue para abarcar poco espacio en el terreno. No pudo imponerse casi nunca en el mano a mano ni romper en velocidad, sí logró buenas apariciones en el área aunque no siempre lo encontraron; cuando pudo recibir en el punto penal generó una situación clarísima que le terminaron sacando sobre la línea.

Juan Fernando Garro: No puede explotar sus virtudes, capítulo mil. Cuando recibe pareciera que primero debe arreglárselas contra sí mismo, para después pensar en encarar. Perdió pelotas simples y tomó decisiones insólitas en jugadas que se ven bastante más claras. Eso sí, cuando los cables le hacen contacto logra cosas muy buenas, un centro perfecto que Coniglio casi convierte y la guapeada que no fue gol de casualidad, solo por pocos centímetros. Incluso anotó un gol de cabeza, lícito, que nos terminaron arrebatando en notable error arbitral. Si alguna vez encuentra equilibrio, será un jugador fundamental. Mientras tanto nos seguimos conformando con su gotero.

Fernando Coniglio: Corrió mucho y tuvo opciones, pudo anotar con un cabezazo que Sánchez bloqueó con los pies, también encontró posiciones de tiro que no aprovechó por intentar acomodarse. Fernando destaca por su empuje, pero por momentos parece estar lejos del gol. Las ganas no se discuten aunque tanto despliegue le termina quitando físico demasiado rápido, o al menos esa es la sensación que se proyecta a la tribuna. El delantero vive del gol y Coniglio pasó otra fecha sin convertir, aunque está claro que intenta aprovechar las oportunidades.

Andrés Chávez: Lo contrario a lo mencionado de Coniglio, Chávez pareciera tener muy en claro que es el delantero más competitivo que tiene Huracán para presentar. Y juega como conforme con eso, ya que se movió muy poco para buscar la pelota y no generó ni una situación de riesgo durante sus treinta minutos en cancha. Es cierto que el Comandante volvía de una lesión, pero ya ha mostrado talento como para ofrecer tan poco.

Rodrigo Cabral: Debut absoluto del pibe, que tuvo buenas intenciones y muchos nervios. Entró por banda derecha, fue al choque con éxito y logró algunas asociaciones en corto. Debe relajarse y confiar en sus condiciones.

Nicolás Cordero: Volvió a sumar un puñado de minutos en los que mostró poco y nada, para destacar un ingreso al área en el cual cayó ante un leve contacto.