Lucas Barrios se reconcilió con el Pueblo Quemero, en una tarde inolvidable. El delantero abrió el partido con un cabezazo soberbio y se sacó la mufa: “Desde chico soñaba con hacerle un gol a San Lorenzo y por suerte se me dio”.
Su historia con Huracán y el fútbol aún no han terminado, aunque independientemente de lo que quede por escribirse, el capítulo que adicionó ayer Lucas Barrios sin duda será de los más dulces. El goleador marcó el 1-0 que impulsó el merecido triunfo del Globo, y dejó atrás los penales fallados el último 19 de abril. “Estoy muy contento. El fútbol da revancha y yo me preparé para esto”, remarcó, visiblemente emocionado apenas terminado el encuentro.
La etapa del delantero en Huracán parecía terminada y destinada a claudicar a la espera de la finalización de su contrato, luego de la fatídica noche acontecida en la Primera Ronda de la Copa de la Superliga. Sin embargo, Lucas aún tenía tinta para modificar el curso: “La pasé mal, muy mal. Huracán es mi casa. Vengo desde los 8 años, quiero mucho a este club, todos los que me conocen lo saben. Por eso lo que pasó me dolió más que a nadie. Hoy le devolví la alegría a la gente”.
El ex Dortmund y Gremio, entre otros, recordó su camino en las Inferiores del club, en una conferencia de prensa especial: “He tenido la posibilidad de jugar muchos clásicos, y hacer goles es un sentimiento único. Pero cuando uno le hace un gol al equipo que desde chiquito soñaba con hacerle un gol la alegría es totalmente diferente. Me acuerdo cuando venía a entrenar a La Quemita, en colectivo desde mi casa en Tigre. Esas cosas son impagables”.
Tras mencionar en varias ocasiones el momento difícil que le tocó atravesar, Barrios valoró el aliento que recibió en este tiempo: “Le agradezco a todos mis compañeros, que me apoyaron siempre. Néstor (Apuzzo) me dio un respaldo importante, porque no era fácil ponerme en un clásico”. Justamente, cuando se lo consultó sobre la posible continuidad del DT, el delantero bancó el trabajo realizado hasta acá: “Arrancó muy bien y hoy ratificamos lo que se viene haciendo. Salimos de la parte de abajo y empezamos a mirar la parte de arriba”.
Como cualquiera que haya sido alcanzado por el fuego sagrado de esta pasión inexplicable, Lucas celebró su bautismo de la mejor manera: “A este club lo quiero de verdad y sé lo que es un clásico. Desde chico soñé con hacerle un gol a San Lorenzo y por suerte se me dio. Por eso le agradezco a la gente que tuvo paciencia y se lo dedico a ellos, que hoy van a poder festejar«. Claro que sí, goleador.
Periodista, ex Olé. El fútbol no es un juego: es todo