Superliga 2019/20; Fecha 11 – Velez 0 vs. Huracán 0 – Empate del Globo en Liniers, ante un Vélez que juega muy bien y que podía quedar segundo en el campeonato. Otra vez sin recibir goles y con la premisa de defender primero y atacar después, el equipo de Apuzzo sigue ganando en confianza y ya no es el equipo al que derrotaron durante todo el año. Buenas actuaciones individuales y un buen trabajo en conjunto, más algunas salvadas extraordinarias de Silva, dejaron el resultado en cero.

LO BUENO

Otro punto: mientras Huracán no reciba goles, se asegura al menos sumar un punto por partido. Por primera vez en el año, el Globo logró estar cinco partidos consecutivos sin perder, sumando varios porotos y con un equipo más consolidado y seguro. Mientras éste sea el plantel, y mientras dure el interinato de Apuzzo, lo más importante será seguir sumando en puntos y en confianza, para que el próximo entrenador no tenga que agarrar un fierro caliente. En definitiva, y con las formas menos vistosas, Huracán sumó 9 de los últimos 15 en juego.

Medio batallador: en el mediocampo del Globo se vio lo mejor del equipo. Con un Vélez muy dinámico, que tiene jugadores de muy buen pie y que se despliegan por toda la cancha, Bareiro y Bogado se las arreglaron para anticipar siempre que pudieron, cortar los circuitos y no quedar nunca mal parados. A pesar de estar los dos amonestados desde el primer tiempo, nunca arriesgaron de más y pudieron terminar el partido. Claro que el resto del equipo también colaboró, sobre todo con voluntad de los del medio y de arriba para presionar en toda la cancha.

“Marcos” Silva: el arquero quemero se vistió de héroe. A los 10 minutos de juego tapó un mano a mano increíble cuando iba a definir el delantero de Vélez. Cuando moría el primer tiempo, salvó un tiro olímpico que tenía destino de gol. La mejor, a los 28 del segundo tiempo, con un remate a quemarropa muy cerca del arco. Por último, y ya en tiempo de descuento, otro remate sobre su palo izquierdo que iba a la red. Cuatro intervenciones fundamentales para mantener el arco cerrado y darle tranquilidad a sus compañeros.

Doble cuatro: la tarea de Gonzalo Bettini fue muy buena. Silencioso y sin exponerse demasiado, trabajó muy bien sobre la banda derecha, delante de Araujo, para darle compañía en un sector por el que atacaba mucho Vélez, o al menos lo intentaba. Además, cuando pudo presionar arriba lo hizo y también trató de entrar en juego cuando Huracán lograba pasar al ataque. Lejos de la velocidad de Briasco o de lo que puede generar Garro, cumplió muy bien con su función, sobre todo teniendo en cuenta que la prioridad de Apuzzo es el cero en su arco.

No entra: por quinto partido consecutivo, el Globo terminó con su arco sin recibir goles. Las atajadas de Silva, la seguridad que brinda la defensa en muchos partidos, y la confianza que va ganando el equipo en general, hacen que los resultados empiecen a aparecer. Si bien Huracán no tiene un juego ofensivo muy profundo, ni genera muchas situaciones de gol por partido, mantener el arco propio sin goles en contra es la forma más fácil para que los de arriba vayan ganando confianza y sepan que con una que acierten pueden cambiar el resultado definitivamente.

LO MALO

Les costó arrancar: el primer tiempo de Droopy Gómez y de Lucas Barrios fue muy bajo. Si bien es cierto que el equipo jugó muy atrasado y siempre se encontraron solos en ataque, no hicieron bien su parte. El primero se mostró muy impreciso, perdió muchas pelotas y hasta estaba fastidioso. El segundo, nunca pudo aguantarla, mucho menos ganar metros en la cancha y ni hablar de patear al arco. Para el segundo tiempo ambos mejoraron y permitieron que en varias ocasiones, aunque sin mucho peligro, Huracán pueda acercarse al arco de Vélez.

Casi no llegó: volviendo a hablar del ataque, es muy difícil encontrar jugadas de peligro del lado de Huracán. Apenas un tiro libre de Droopy Gómez que se fue muy cerca del ángulo, y nada más. El planteo de Apuzzo fue sumamente defensivo, con el equipo muy atrasado y lejos del arco rival, lo que hizo que fuese casi imposible generar peligro. Si bien está claro que lo primordial es defender el arco propio, en algún momento hay que soltar un poco a los jugadores para ver si se genera alguna situación de gol.

Cedió la iniciativa: lejos de su arco y sin la pelota, Huracán se pasó casi todo el partido defendiendo. El desgaste en sus jugadores fue grande, los del medio terminaron el partido muy cansados, y el riesgo de jugar tan cerca de Silva pudo costar caro. Vélez, con jugadores muy rápidos y de buenas ideas, tuvo tiempo de generar situaciones y pensar cada vez que se acercó al área del Globo. Por suerte, nunca terminó las jugadas como pretendía.

Droopydependencia: con estos planteos y con esta forma de jugar, Huracán depende mucho de Gómez para generar peligro en el área rival. Si él está fino y preciso, las chanches aparecen, pero si no lo está (como en el primer tiempo) el Globo prácticamente no ataca. Lo mismo pasa con las pelotas paradas, ya que es el encargado de todas y el único que parece poder sacarles jugo. En Liniers se notó la falta de precisión de Gómez, que no pudo sacarle provecho a algunas corridas de Briasco o de Barrios para generar situacioens de gol

Aparecieron los huecos: si bien el arco quemero sigue cerrado y lleva cinco partidos sin recibir goles, ante Vélez aparecieron algunos huecos importantes que de casualidad no terminaron en gol. Silva salvó dos mano a mano casi en el área chica, de frente al arco, que claramente tenían como destino la red. En uno, el hueco apareció entre Ibáñez y Merolla, mientras que en el otro fue entre Salcedo y Araujo. Además hubo otras jugadas en las que los hombres de Vélez estuvieron cerca del gol adentro del área.

LO FEO

Pitana: el árbitro del encuentro tuvo un partido muy malo. Si bien comenzó con un gran acierto (no hubo penal de Silva ante Bouzat), luego tuvo errores graves para los dos lados. En contra de Vélez, un penal muy claro de Bareiro con la mano y una segunda amonestación muy merecida para Ibañez que nunca llegó. En contra de Huracán, un agarrón a Salcedo en el área (terminó cobrando una falta inexistente de Merolla) y una falta de último hombre ante Briasco que era expulsión y tiro libre para el Globo sobre el final del partido.

LAS PERLITAS

El mejor: Antony Silva

El peor: Lucas Barrios

El dato I: sobre 17 partidos con Pitana como árbitro, el Globo apenas pudo ganar tres. El resto fueron cinco empates y nueve derrotas, con 11 goles a favor y 27 en contra.

El dato II: Huracán no gana en Liniers desde el Apertura 2007, cuando ganó por 2 a 1 con dos goles de Franzoia. El técnico del Globo era Osvaldo Ardiles. Desde entonces pasaron tres derrotas y dos empates.

El dato III: 490 minutos acumula Huracán sin recibir goles, desde el cuarto que le metió River en el Ducó. En el medio ya pasaron Defensa y Justicia, Atlético Tucumán, Estudiantes, San Lorenzo y Vélez.