Superliga 19/20 – Fecha 22 – Huracán 1 vs. Independiente 0 – Vital triunfo del Globo en el cierre de la ante última jornada. Tras un primer tiempo en el que le costó hacer pie, logró marcar la diferencia al comienzo del complemento y la sostuvo a puro corazón. Un bálsamo sobre el que, ojalá, Damonte pueda construir en lo que queda de la temporada.

LO BUENO

La defensa, con Saúl a la cabeza. Salcedo fue el pilar del fondo, que después de un tiempo largo dio garantías. Es cierto que en el primer tiempo Independiente generó algunas situaciones, pero más por el desborde del mediocampo que por la propia labor de la última línea. Al liderazgo del paraguayo se sumó otra buena actuación de Merolla y una versión mejorada del último Ibañez que habíamos visto. Bettini cumplió.

El 1 aprueba. Pellegrino atajó las que debía atajar. Sin tener una de esas estiradas que valen puntos en sí mismas, el arquero supo mitigar el peligro en las pocas ocasiones en que la defensa se vio superada. Si detrás del bloque defensivo el 1 responde, Damonte tendrá buenos cimientos para edificar hacia adelante.

Un gol de la casa. Ramirez y Briasco se combinaron para darle a Huracán la ventaja. El volante interceptó un pase de Leandro Fernández y con absoluta decisión traspasó inmediatamente la mitad de cancha, superando la línea de mediocampistas rivales, lo cual instó a Barboza a salir de la cueva. Briasco aceleró hacia el vacío, Ramirez soltó la bocha con precisión y en el momento justo. La definición de Beto al primer palo superó a campaña y el resto fue toda alegría. Todos los goles de Huracán son hermosos, pero cuando llevan la firma de la cantera tienen un valor agregado.

Así te quiero. De local es normal esperar que el equipo asuma mayor protagonismo. E independientemente de gustos, filosofía y materia prima, todos nos entusiasmamos con los primeros 10 minutos del segundo tiempo. ¿Por qué? Porque vimos un equipo que metió en el último cuarto del campo al Rojo. Sin hacer malabares, con centros, con rebotes y rebotes; con mucho coraje, con intensidad… Si las virtudes más finas escasean que nunca falte determinación y empuje. Es cierto que el gol llegó de contra, pero la confianza se construye.

Volvió Chávez. Con un par de acciones individuales al Comandante le alcanzó para generarle inconvenientes a Independiente. El indulto vino con victoria y la esperanza de que si el delantero se pone las pilas puede ser una pieza importante en la Copa de la Superliga. Ojalá.

LO MALO

¿Mejor desde el banco? Ojeda, desde que empezó a destacarse en Ferro y despertar la atención en Racing, era el jugador que vemos en cuentagotas cuando entra desde el banco. Buena pegada, fino. Llamativo a los ojos. Pero su aporte, en general, siempre parece más ligado a lo eventual que sostenido: un centro, un tiro libre, algún pase… Desde que llegó a Huracán vemos eso cuando arranca de suplente, lo cual nos invita a pensar en cómo sería con rodaje, con más minutos. Sin embargo, llega la titularidad y es el primer cambio que a uno se le viene a la cabeza cuando termina el primer tiempo.

LO FEO

El primer tiempo. Con todo el lastre que traía el equipo por el presente y la falta de aspectos positivos, no era raro imaginar un comienzo dubitativo. Además Independiente, si bien arrastra una floja campaña, venía con el envión anímico tras obtener una agónico pase de fase en la Sudamericana. Pero siendo local siempre se espera más y al Globo le costó horrores afirmarse en el terreno. Si bien la visita no tuvo tantas chances para convertir, dominó las acciones y el arco de Campaña nos quedó lejos.

LAS PERLITAS

El mejor: Salcedo.

El peor: Ojeda.

El dato I: ¡Al fin! Huracán cortó una racha de 11 partidos sin ganar en Superliga (8 derrotas y 3 empates).

El dato II: La última victoria en Primera ante Independiente había sido por el Apertura 2010, 1-0 (Roffes). Brindisi dirigía al Globo mientras que Mohamed estaba en el banco del Rojo.

El dato III: Tras el gol de ayer Briasco se subió al podio de goleadores Quemeros en esta Superliga. Tiene 2. El segundo lugar es para Coniglio (3). Al frente va Droopy Gómez (4). Pocos, pero lógico teniendo en cuenta que el Globo promedia apenas 0,63 gol por partido.