Copa de la Superliga 2020 – Fecha 1 – Huracán 0 vs. Talleres 3 – El seguimiento de cada jugador del Globo.
Fernando Pellegrino: Poco para reprocharle, tal vez hilando muy fino se le podría haber pedido algo más en el segundo gol, pero la pelota entró demasiado justa. Se rompió su mini racha.
Gonzalo Bettini: Como todo Huracán, se pareció más al del grueso de la temporada que al de sus últimas actuaciones. Hizo de la imprecisión un culto y no tuvo ese empuje que compensó falencias en las últimas actuaciones.
Saúl Salcedo
: Pésima participación de Saúl, cometió un error tremendo en el primer gol de ellos, ya que llega a ganar la posición pero sobra la maniobra y termina pagando carísimo. Podemos discutir largamente la expulsión, exagerada en contexto pero justa en lo reglamentario. Y si le das de comer al juez, la responsabilidad es toda tuya.
Lucas Merolla: Mal partido de Merolla, fuera de foco, desconcentrado y mal parado casi siempre. Dudó cuando salir y cuando no, regaló una pelota increíble en la previa al tercer gol de Talleres y nunca impuso condiciones ante sus marcadores.
César Ibáñez: Fue, con poco, lo mejorcito del fondo. Fundamentalmente por mantener seguridad en su banda, aunque terminó ingresando en la confusión general del equipo durante el complemento.
Mariano Bareiro: Tuvo un partido con altibajos, arrancó bien con la marca pero rápidamente le costó sostener la posición y dejó mucho espacio a sus espaldas, como se vio en el segundo gol de Talleres. Cuando fue a la zaga mantuvo el desajuste.
Santiago Hezze: De lo más flojo del pibe desde su debut, impreciso con la pelota y flojo en la marca. No rindió como lo venía haciendo y el equipo lo sintió, aunque cueste creerlo de alguien que tiene tan pocos minutos.
Sebastián Ramírez: Otro discreto partido de Ramírez, donde nuevamente no terminó de quedar en claro su función. No aportó demasiado a la marca y menos al ataque, no tuvo lugar para explotar su control en velocidad y terminó flotando sin éxito en tres cuartos de cancha.
Martín Ojeda: Mal partido de Ojeda, tras su buena actuación en Banfield se mostró poco y casi no tuvo participación ofensiva, más allá de alguna corrida sin éxito. No logró aportarle control al equipo y estuvo demasiado estático en la banda.
Norberto Briasco: Fue lo mejorcito de Huracán, al menos por sacar jugo en las pocas situaciones que tuvo con balón dominado. Generó el penal y luego tuvo la posibilidad más clara de descontar, con el partido ya 2-0. La ofensiva fue Briascodependiente y el Beto respondió hasta donde pudo.
Nicolás Cordero: Tuvo un partido cargado de impotencia, apático en su accionar y marcado por el penal desperdiciado. Si bien hay mérito en el arquero rival, la poca potencia y precisión que imprimió Nicolás terminó beneficiando la respuesta de Herrera. Antes y después ofreció poco, rebotó mal la pelota y no tuvo peso ofensivo.
Mauro Bogado: Entró con el partido definido y poco pudo hacer para cambiarlo, no tuvo precisión ni grandes maniobras para favorecer la ofensiva.
Andrés Chávez: Entró muy mal, con todo definido pero sin el empuje de partidos anteriores. Tras dos partidos de no hacerlo, con gol incluido, volvió a dar motivos para quedarse sentado en el banco.
Agustín Curruhinca: Intentó aprovechar sus minutos y se notó, el contexto era muy desfavorable pero al menos el pibe dejó en claro que lo intentó. Y cuando la apatía reina, se valora.
