Torneo Socios – Fecha 12 | Huracán 0 vs. Independiente 1 | Huracán perdió ante Independiente en el Palacio y el ciclo de Kudelka alcanzó un punto de no retorno. El equipo no supo cómo hacer valer su superioridad y el entrenador decidió sostenerse en esa línea. Hay tiempo para arrancar de nuevo, pero no para insistir sobre lo que no funciona.
Tras dejar pasar en Junín la posibilidad de hilvanar dos victorias por primera vez en el torneo, Huracán volvía a presentarse recibiendo a Independiente en el Palacio Ducó. Kudelka sorprendía sacando a Ibáñez para poner a Grimi, además Cóccaro debutaba como titular en reemplazo de Candia.
Si algo sabemos de Independiente, es que Fabricio Bustos suele destacar por su faceta ofensiva en el lateral derecho. La no velocidad de Grimi fue una invitación para que el rival ataque por ese sector, obligando además a que Cabral se pase a la derecha y sea Silva quien tenga, por izquierda, la obligación de relevar a Leandro.
Huracán salió a buscarlo, tuvo algunos tiros de esquina y metió varios centros despejados por los centrales visitantes. Sin embargo rápidamente Independiente encontró luz por el sector izquierdo Quemero, y allí falló de forma muy contundente la planificación original.
Tan evidente fue que Kudelka mandó, apenas pasado diez minutos, a calentar a César Ibáñez mientras el resto de los suplentes se encontraban sentados en la platea. No solo Ibáñez no terminó ingresando, sino que además Grimi salió recién a cuatro minutos del final y por un delantero.
Independiente aprovechó el desajuste defensivo para generar peligro con tiros de Velasco, Soñora y Braian Martínez, pero Marcos Díaz respondió perfecto en todas ellas.
Con Silva y Vera cuidando el espacio cedido por el ingreso de Grimi, Cristaldo disputado su peor partido del campeonato y Cabral anulado en el cambio de banda, al Globo le costó horrores ser peligroso.
De todas formas tuvo su momento, a puro empuje, y allí encontró las dos mejores opciones de la tarde. Primero un centro de Cristaldo rebotado por Merolla, la bocha quedó servida a posición de Yacob pero Claudio definió liviano ante una muy buena respuesta de Sosa.
Acto seguido Grimi cruzó un centro que encontró solísimo a Ismael Quílez, el lateral resolvió perfecto pero Sosa agigantó su figura bloqueando un claro mano a mano.
Huracán estaba más cerca que nunca cuando Independiente rompió el cero a su favor. En la misma posición desde la cual minutos antes había asistido a Quílez, Grimi dejó salir, con tiempo y espacio, una pelota que era claramente para Independiente.
El rival apuró el lateral y así gestó el ataque que Romero cerró con centro a puertas del área desde la izquierda, Yacob dejó corto el rechazo que Alan Soñora conectó con un débil remate que, desvío previo, desacomodó a Marcos Díaz.
Gol del Rojo en el momento donde menos se lo esperaba. Baldazo de agua helada para Huracán, golpe del cual nunca se terminaría de reponer.
Marcos Díaz salvó el 2-0 con otra gran atajada y Kudelka tomó la decisión de sostener la misma estrategia de cara al complemento, con el único cambio de Acevedo reemplazando a Cabral.
Huracán estuvo toda la segunda mitad lateralizando el juego, con Galván como principal responsable en la salida y sin movilidad entre los ofensivos, cada vez más cerrados al centro del ataque.
Tan malo fue el funcionamiento del Globo, que apenas se acercó a la posibilidad de convertir con dos tiros de esquina. Uno cabeceado mal por Cóccaro, el otro mal resuelto por Merolla; a Lucas se le vino muy encima la pelota y en lugar de tirar el zurdazo la terminó regalando en su intento de controlar.
Kudelka no hizo cambios que modifiquen las formas, metió a Candia por un Silva en pésimo nivel mientras que Toranzo reemplazó a Vera, cuya frescura murió atada a la necesidad de ayudar a Grimi en la izquierda.
Cristaldo nunca ganó precisión, Cóccaro destacó apenas con algún que otro buen movimiento en el área y el ingreso de Rincón en los últimos minutos regaló otra prueba contundente del por qué juega poco y nada: un centro que fue una falta de respeto, pero no la única que tuvo Huracán en la ya noche.
Con Galván, Quílez y Grimi abasteciendo al resto terminó Huracán el partido. Y como dos más dos es cuatro, la cosa terminó mal.
Lejos del gol, lejos del triunfo, lejos de salir de la zona de descenso. 12 fechas después, Kudelka tiene al equipo en la misma posición que lo agarró (y mantuvo) durante el torneo anterior: al borde de la relegación.
Huracán da la sensación de tener buenos jugadores, pero no logra sacarle brillo, ni mucho menos. Esta derrota tiró nuevamente para atrás el promedio de puntos de Kudelka, y ya no tiene sentido volver a apostar en él.
Para muchos este ciclo está concluido hace rato. Otros vimos que los empates cortados por la victoria ante Aldosivi (Justo después del apoyo público del plantel) representaban una oportunidad de elevar el promedio, pero eso ocurrió. Eso fue solo un espejismo.
Ya no hay herramientas para pensar que Kudelka pueda remontar la historia. Los resultados no llegan y la idea que tiene el entrenador para buscarlos ha quedado sepultada ante Independiente.
Kudelka no va a cambiar sus formas, lo demostró sosteniendo a Grimi, lo demostró sosteniendo una paciencia inconcebible ante nuestras urgencias. Entonces no queda otra que cambiar a Kudelka.
“Si se va, ¿Quién viene?”, es la pregunta a coro. Uno imagina que esta Comisión Directiva, elegida en buena parte por sus promesas de idoneidad y profesionalización de las áreas, debería tener más de una respuesta.
Uno imagina, sin saber nada de nada, que Huracán debería apuntar a aquello que le dio resultado en el pasado reciente. La salida de Alfaro significó un quiebre del cual todavía no nos recuperamos. Pasó Mohamed, de formas bien distintas, Damonte, un experimento fallido, y Kudelka, también de formas distintas y quien viene aportando más problemas que soluciones. ¿Pensar en Miguel Ángel Russo es una locura?
Vuelvo a escribir lo mismo que expuse en este espacio antes de la salida de Damonte. Locura es hacer la misma cosa una y otra vez esperando obtener un resultado diferente.
Quemero de nacimiento, Socio A01775. Locutor Nacional, redactor y Vermoutheano. 10 años en Soy Quemero.