Tras la victoria con Independiente Rivadavia, el entrenador del Globo analizó el complicado trámite en relación a la ansiedad que había en el Ducó.

Huracán es uno de los punteros del fútbol argentino. Sí, porque tras el difícil triunfo por 1 a 0 frente a Independiente Rivadavia, el Globo alcanzó los 13 puntos y lidera la tabla junto a Talleres y Unión. Una vez más, Nacho Pussetto marcó el único gol del encuentro, y además, se convirtió en el goleador del torneo en el último partido previo al receso por Copa América.

En conferencia de prensa, Frank Darío Kudelka hizo un análisis del encuentro: “Siempre los equipos tienen que mejorar cosas. Nosotros tenemos un equipo de mucha intensidad, de mucha vertiginosidad, a veces eso es muy conducente y a veces es contraproducente. Ese tipo de cosas, manejar mejor los momentos en que vas ganando el partido, no es fácil, como hoy nos pasó. El primer gol llegó como consecuencia de jugada, tener la pelota, presionar tras pérdida, ser paciente, acorralar al rival en su campo. Después el rival cambia su mentalidad, sale a jugar, deja un espacio. Ahí es cuando a veces la velocidad hace que no siempre tengamos la ductilidad de pensar el momento del partido.”

Kudelka destacó la nueva valla invicta, esta vez con Meza en el arco: “Es un equipo que en 12 fechas recibió cuatro goles nada más, en los últimos cuatro no nos han convertido. A mi me gusta más un equipo de ataque y posesión, pero saber defender también es importante”. En relación al partido del Mono, mencionó: “Muy bien, al igual que todos los chicos que han ingresado en estos últimos partidos por jugadores que venían siendo titulares. El jugador tiene que estar preparado para cuando le toque, de eso se trata. A eso me refería con incrementar el grado de competencia interna, y los jugadores lo están logrando. Quienes entran están a la altura de la necesidad de Huracán.”

Aprovechó para deslizar su mirada en relación al trámite del partido y los murmullos que se escuchaban en la segunda parte: “No es que nos relajamos, hicimos un gran desgaste físico, táctico y mental durante 25 minutos, y después perdimos la posesión del balón. En el segundo tiempo volvimos a dominar territorialmente los primeros minutos, pero no con la posesión. Había mucha ansiedad, la cancha juega también. En el segundo tiempo empezamos a armar línea de tres con Fattori, y jugábamos para atrás para solventar, tener más tiempo el balón, y la cancha pedía que vayamos a buscar el segundo gol. Hay que saber manejar los momentos, no les puedo decir a los de afuera que digan lo que nosotros pretendemos, y a veces eso se contagia, había mucha ansiedad”.

También se volvió a hablar del tema del mercado de pases, dónde FDK reiteró su postura: “Lo venimos diciendo, de eso se trata. Como otras veces me ha tocado decir, ‘por favor que venga el libro de pases’, en este caso yo sigo pensando que ojalá no hubiese ocurrido eso. El sostener un equipo muy bien armado es importante. Reitero que la consolidación de este grupo tiene que ser en base a la mantención, más allá de algún refuerzo que pueda venir. Si es posible, porque yo lo digo sentado aquí desde mi egoísmo de técnico, y creo que el primer gran refuerzo de este plantel sería que quede tal cual. A veces hay factores y necesidades económicas, seguramente haya ofertas”.

La posibilidad de la salida de Pussetto no pasó desapercibida: “Nos vamos a hacer cargo, es muy posible que si viene una oferta importante, se vaya. Será una decisión dirigencial, del club, pero también de él. Y si no, lo veo con mucho gusto en quedarse, con mucho compromiso, pero no solo dentro o fuera de la cancha, sino de querer lograr cosas con Huracán. Eso no es fácil conseguirlo, estamos en la selva, convivimos con muchos factores externos que afectan nuestro trabajo, y más cuando se abre un mercado de pases. El fútbol también es un negocio, y aflora en los mercados. Mientras tanto, están puestas las garras”.

A su vez, sostuvo la huella del equipo en relación al plantel rival: “Nosotros pregonamos mucho en los entrenamientos esa forma de jugar: tener un equipo que maneje la posesión según los momentos del partido. Esos momentos existen en todos lados. Por más que uno las trabaje, es difícil llevarlo adelante. El rival también juega, el de hoy vino con poco gol en contra desde que está usando este sistema. Al proteger esa línea de cinco férrea, no se movía, y nosotros tuvimos la pelota 35 minutos, hicimos un gol, dominamos territorialmente y en posesión de la pelota. Después ese equipo se sintió tocado porque convertimos, y salió a jugar de otra manera”.

Cerró la conferencia con las conclusiones e ideas de cara a lo que se viene: “Yo me quedo con que en el segundo tiempo ordenamos el equipo de mil y una maneras, no nos generaron situaciones. Valoro el aspecto defensivo. Esa es la idea: mejorar la posesión del balón para determinados momentos del partido”.