Ramón Abila finalizó como máximo anotador del Torneo Transición 2014 de la B Nacional. Que no se corte, Wanchope, ¡queda un partido!
Llegó hace casi 11 meses, entre rumores y desconfianza de gran parte del pueblo Quemero, que no veía la necesidad de comprar el pase de un delantero que no destacaba, y que había sido suplente en Morón y Sarmiento de Junin.
Este cordobés, pícaro y fanático de la Mona Jimenez, no tardó demasiado en hacerse querer por el hincha del Globo. A fuerza de goles se fue ganando el reconocimiento de la gente. En la temporada 2013/2014 disputó 18 partidos, convirtiendo 6 goles, y finalizando el torneo como suplente de Leandro Caruso.
Comenzada la temporada actual, «Wanchope» vio el inicio del primer encuentro desde la platea, ya que Cristian Milla, flamante refuerzo, arrancaba de titular y convertía dos goles, siendo la figura del equipo en la victoria ante Temperley. Para colmo, en el banco estaba Ivan Borghello, refuerzo que llegaba con buenos pergaminos a Parque Patricios.
Ya en la 3ra fecha, Abila ingresaba desde el banco de suplentes, situación que se repetiría hasta la 6ta jornada ante Atlético Tucumán, partido en el que arrancó como titular y convirtió un gol. Desde allí, la número 9 fue suya, y con goles y más goles se ganó el cariño de todos.
Abila convirtió en las fechas 6, 12, 17 (doblete), 18, 21 y su «hattrick» ante Independiente Rivadavia, finalizando el torneo con 9 goles, siendo el máximo anotador en la Zona B y el máximo goleador (junto a Nicolas Mazzola de Instituto) del certamen.
Además, por Copa Argentina convirtió en los encuentros ante Boca Jrs, Estudiantes LP y Atlético Rafaela, transformándose en el máximo goleador histórico de la Copa (anotó tres goles en la edición 2011-2012 con Sarmiento de Junín, dos en la 2012-2013 con Deportivo Morón y tres en la 2013-2014 con Huracán).
Con la camiseta del Globo, Ramón «Wanchope» Abila disputó un total de 37 partidos, convirtiendo 18 goles.