Superliga 2017/18 – Fecha 8; Godoy Cruz 2 vs. Huracán 1 – Huracán sufrió en Mendoza lo que disfrutó el sábado pasado en el Palacio Ducó, fue superior a Godoy Cruz pero se volvió con las manos vacías tras caer derrotado por dos a uno. El Globo realizó un gran primer tiempo donde movió la pelota como hacía rato no lograba, falló en la zona caliente y terminó recibiendo un gol sobre el cierre. Ignacio Pussetto devolvió la esperanza arrancando el complemento pero otra desinteligencia defensiva nos dejó masticando bronca. Mucho para destacar, aún en esta caída que duele.

De rojo saltó Huracán al verde césped del Estadio Malvinas Argentinas de la capital mendocina, reducto que nos ha hecho felices en más de una oportunidad. Este entonado equipo de Gustavo Alfaro debía defender su gran momento ante Godoy Cruz Antonio Tomba, que llegaba a este compromiso sin hacer cedido un solo punto jugando como local por Superliga. Patricio Toranzo retornaba al primer equipo en lugar de Fernando Coniglio, de tal forma el Globo volvía a presentar en cancha un mediocampo inédito.

Pero para sorpresa de varios el equipo tardó muy poco en comenzar a manejar la pelota. La escalada empezaba en posición de Calello, Bogado limpiaba para los tres cuartos de cancha y allí ocurría un interesantísimo movimiento entre Toranzo y Romero Gamarra; Kaku mostraba libertades por el centro del ataque asociándose con un Pussetto descontracturado como nunca, metiendo diagonales y participando mucho en la gesta.

Claro que a esta positivamente inédita tenencia del Globo le faltaba el toque final, Ábila estaba absorbido por los centrales Bodegueros y a falta de presencia en el área los volantes empezaron a resolver con tiros de media y larga distancia. Probaron Pussetto, Chimino, Toranzo y Romero Gamarra, la mejor de todas fue el segundo intento de Kaku, zurdazo venenoso que cayó en el techo de la portería defendida por Burián.

La ofensiva de Godoy Cruz era similar pero menos elaborada, sus avances mucho más esporádicos y apenas un zurdazo desviado de Rodríguez puso en alerta al arco de Marcos Díaz. Sin embargo a tres minutos del final llegaría el golpe de injusticia, Santiago García hace gala de su talento rebotando una perfecta asistencia a la carrera de Ángel González. El volante aprovecha un fondo Quemero adelantado para volar a espaldas de Chimino y meterse al área, Salcedo se pasa en el retroceso, Nervo no llega a cortar y el potente derechazo deja sin opciones a la nula respuesta de Díaz. Se iba al descanso en ventaja el Tomba, gracias al avance más profundo que logró en la noche.

Lejos de derrumbarse Huracán arrancó el complemento recuperando la paridad en el marcador. Corrían dos minutos cuando Alejandro Romero Gamarra aprovechó una recuperación en el mediocampo  para habilitar de forma perfecta con gran zurdazo desde terreno propio a la corrida de Ignacio Pussetto. Nacho rompió por derecha para meterse solito al área y definir perfecto entre Burián y su poste izquierdo. Uno a uno y otra vez Pussetto incidiendo en el marcador.

A partir de ese momento llegaría el lapso más peligroso del Globo en la noche. Enseguida el propio Pussetto se mete otra vez al área por derecha y Tomás Cardona le engancha el pie cometiéndole un claro penal no advertido por Diego Abal. A continuación una buena maniobra de toques termina con Romero Gamarra habilitando de cabeza al solísimo Patricio Toranzo, sin embargo el Pato buscó más precisión que potencia definiendo a posición de Burián y perdiendo una oportunidad clarísima para lograr la ventaja.  El propio arquero uruguayo saldría mal en un córner dando rebote que ni Nacho ni Wanchope pudieron direccionar al arco vacío.

Huracán estaba para el segundo cuando Godoy Cruz se encontró de forma increíble con la victoria. Otro de los tantos pelotazos a posición de Santiago García, Martín Nervo salta para disputar el balón aéreo pero termina fallando notablemente ante un Morro que solo debió girar sobre su posición para sacar el veloz derechazo que agarró mal parado a Marcos Díaz. Dos a uno en contra, de la nada.

Esta vez el Globo sí acusó el golpe, Fernando Coniglio había entrado un minuto antes pero los quince que quedaron se desenvolvieron con tranquilidad para el local. Montenegro por Bogado para los últimos diez y Silva por Romero Gamarra sobre el ocaso, Huracán jamás estuvo cerca de empatar ante un Godoy Cruz aferrado a su ventaja con uñas y dientes. Solo quedó tiempo para la roja directa a Lucas Villalba, por una patadita de atrás sin pelota. Final y caída, primera en los últimos siete juegos de Superliga.

Perdió Huracán pero mostró herramientas de tenencia casi inéditas en el ciclo Alfaro, mucha movilidad en los volantes y recursos para anteponerse a una defensa poblada. Godoy Cruz golpeó en momentos favorables al Globo y la segunda desventaja terminó de desmoralizarnos, dejando escapar puntos que sin ningún tipo de dudas merecimos sumar.

Pero claro, esto es por goles y no por merecimiento. Sin embargo creernos los peores tras esta derrota es tan nocivo como marearnos por vernos tan arriba en la tabla. La única verdad es que se viene Vélez en un partido importantísimo por todos los frentes, tenemos dos semanas para pasar este mal trago y trabajar la forma de potenciar los grandes momentos de fútbol que logramos en Mendoza.