Superliga 2018/19, Fecha 20 – Huracán 1 vs. Unión 3 – Huracán profundizó su confusión cayendo por tres a uno ante Unión, primera derrota en el Ducó de la temporada. El Globo solo fue ofensivo en desventaja y contribuyó a los goles del rival con tres errores muy marcados, el descuento parcial de Lucas Barrios avivó un fuego que el equipo nunca logró encender. Los de Mohamed no encuentran rendimiento pero tampoco resultado, cuatro sin ganar con la peor producción de puntos en la últimas dos Superligas. ¿Y ahora? Intentar calmar la ansiedad, no dejar de exigir y buscar ataque para recuperar el terreno cedido.
El cielo gris y la tenue lluvia que acompañó la salida de Huracán al verde césped del Palacio Ducó parecieron advertir lo que veríamos a continuación, un equipo sin colores. Tras la decepcionante actuación en Córdoba era turno de recibir a Unión, equipo instalado hace rato en la mitad superior de la tabla y que antes de golear a Atlético Tucumán en Santa Fe llevaba en su mochila una seguidilla de seis sin ganar con cuatro derrotas.
El once de Mohamed se presentaba sin sorpresas ni vueltas de rosca: 4-4-2 con Araujo en el lateral izquierdo y Andrés Roa regresando a la titularidad. Pero el pitazo inicial empezó a mostrar algunos desajustes, Damonte volvió a pararse delante de Rossi e Iván jugó lejos de los centrales, como nos tenía acostumbrados. Roa fue tirándose lentamente al centro del ataque y por momentos fue Rossi quien apareció en la izquierda, esto le cedió mucho terreno al rival y dejó desacomodada a la última línea.
Pero Huracán tenía la pelota, con más ganas que profundidad, ese pase largo para Auzqui no apareció limpio y Roa lograba algunos chispazos de talento acompañados por malas resoluciones. Barrios se atrasaba demasiado en búsqueda de participación y Gamba no encontraba salir de su laberinto. Entonces el juego se tornó ríspido, friccionado y cortado, incluso un cabezazo involuntario de Lotti contra Mancinelli terminó sacando al delantero rival del partido.
En medio de la confusión generalizada fue Unión quien supo sacar rédito, primero con un cabezazo de Zabala que Antony Silva sacó volando y luego aprovechando al máximo un error del Globo en 26 minutos. Saúl Salcedo jugó al pelota sin mirar tirándola a un sector derecho del fondo en donde no había ningún compañero; Franco Fragapane no solo tuvo tiempo para recuperarla, girar y acomodarse ante la no presión de Chimino, también supo meter el gran derechazo que se clavó contra el poste izquierdo de Silva. Ganaba el Tatengue.
Perdía Huracán pero la confusión no terminaba ahí, dos minutos más tarde Israel Damonte regaló la pelota en el círculo central para que Troyansky ponga a correr a Cuadra, el delantero se metió sin oposición al área y de cara a Silva tocó al centro, allí donde Mauro Pittón definió al arco desprotegido. Ráfaga visitante y el Globo que perdía dos a cero, exagerada diferencia aun haciendo pocos méritos para que así sea.
El equipo pudo irse al descanso 0-3, Troyansky pegó un tiro contra el poste, pero también estuvo cerca de descontar en lo que quedó de primera mitad, seguramente los mejores quince minutos del Globo en la tarde. Huracán priorizó la ofensiva, metió a sus laterales en campo rival y tuvo cinco opciones para anotar: Cabezazos de Damonte, Gamba y Barrios, un claro shot de Andrés Roa que terminó pegada al poste de Fernández y el tiro largo de Auzqui que besó el travesaño y salió. Además una polémica, Nelson Acevedo bajó a Damonte en plena área visitante, jugada que en cualquier otro sector de la cancha pudo haber sido sancionada como falta
Ya en el complemento Huracán salió sin cambios y Roa lanzó el centro que Saúl Salcedo casi manda a guardar de cabeza, inmediatamente impulsó la pelota en paraguayo recibió un tremendo golpe de Yeimar Gómez que le valieron veinte puntos en la ceja. El equipo necesitaba algún cambio y estos terminaron ocurriendo de forma absoluta en los primeros trece minutos; Mohamed quemó sustituciones colocando a Toranzo, Mendoza y Chávez por Araujo, Rossi y Auzqui, el mejor jugador del equipo en el momento que fue cambiado.
Huracán se reconfiguró, metió a los dos nueves en el área y aunque tuvo grandes dificultades para introducir balones limpios allí terminó alcanzando el descuento a ocho del final; Javier Mendoza jugó un perfecto centro desde la banda izquierda y Lucas Barrios conectó el cabezazo que pegó en el poste antes de ingresar.
Entonces las energías se renovaron, fundamentalmente las del Pueblo Quemero, y no importó que Roa tuviera que jugar los noventa minutos tras casi un mes de inactividad ni tampoco la “heroica” de Salcedo manteniéndose en cancha absolutamente golpeado por no tener sustituciones. Unión perdió las formas defensivas y la posibilidad de sumar cobró forma por primera vez desde la primera diana rival, sin embargo y enseguida un bochazo largo ubicó la carrera de Franco Troyansky mano a mano con Mancinelli; Federico ganó la cuerda aun corriendo desde atrás pero sin ver que Silva había salido jugó la pelota despacio hacia el arco desprotegido. Troyanski burló el descalabro defensivo y anotó en soledad el lapidario 1-3.
Fue final con derrota, primera como local en la temporada. Algunos aplausos, otros insultos, y varias personas pidiendo directamente la cabeza de todos. Exagerado teniendo en cuenta que Huracán viene de pasar dos años seguidos luchando la permanencia hasta el final, disputa que en esta temporada fue resulta siete jornadas antes.
Pero las muestras de reprobación tienen su justificación, Huracán solo sacó 2 de los últimos 12 (Lo que no ocurría desde la temporada 2016/17) y cedió mucho terreno en la lucha por clasificar a la Copa Libertadores 2020, ubicación que venía defendiendo hace bastante. Estamos acostumbrados a un Globo con poco brillo, pero no a uno que no sume, y este momento de la temporada une ambas falencias.
El equipo jugó sin una conducción clara, adentro y afuera del verde césped, quedó demostrado que Roa no es quien debe solucionar todos los problemas con su sola presencia y vale recordar, aún con críticas justificadas, que pedir la salida de algún futbolista puede llegar a implicar el ingreso de otro que no esté a la altura.
Quedan 15 puntos, 9 de ellos en casa. Las chances de clasificar a la Copa 2020 están intactas, pero el margen de error absolutamente manoseado. Se necesitará una alta cosecha para que así sea, al menos una diferente a la actual. Busquemos ser ofensivos en Paraná, pongamos los buenos talentos al servicio del ataque.
Quemero de nacimiento, Socio A01775. Locutor Nacional, redactor y Vermoutheano. 10 años en Soy Quemero.